INGREDIENTES
- 2 plátanos verdes
- Sal
- Aceite de girasol
PREPARACION
Pelamos
los plátanos y los cortamos en rodajas de unos 3 centímetros.
En un
cazo con abundante aceite o freidora (si se dispone), el fuego no muy alto, freímos
entre ocho y diez minutos para que se ablanden. (El aceite los tiene que cubrir
por completo).
Cogemos
una hoja de papel de horno y lo cortamos a tamaño folio. Cuando lo tengamos a
tamaño folio lo doblamos por la mitad.
Ponemos una rodaja de plátano en
el papel y doblamos, aplastamos (con cuidado), bien con la palma de la mano, el culo de un
vaso, lata o lo que tengamos a mano en esos momentos. Comprobaremos que tiene
un grosor entre 5 a 8 milímetros. Repetiremos el mismo paso con las siguientes
rodajas de plátano.
En un
cuenco llenamos de agua y añadimos un poco de sal. Dejamos reposar los plátanos
dentro del agua salada durante 30 segundos y volvemos a freírlos con el aceite
bien caliente unos tres minutos o hasta
que veamos que estén dorados.
Espolvoreamos
con sal a nuestro gusto.
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